Hoy os regalamos la crónica que nuestro colaborador David ha escrito sobre el gran concierto en el Heaton Park de Manchester el pasado 7 de Junio:
"Es cierto: Oasis nunca han superado la frescura de sus dos primeros discos (Definitely Maybe y (What’s the story?) Morning Glory), discos con los que a mediados de los noventa, y con el permiso de Blur, reinventaron el brit-pop. Tambien es cierto que los conciertos de los que voy a hablar tuvieron lugar en Manchester, su ciudad natal, donde son adorados como dioses. Pero, a pesar de todo esto, ¿cuantas bandas serian capaces de juntar un total de 21.000 personas a lo largo de 3 dias (jueves, sabado y domingo) en la misma ciudad? Sin duda Oasis conservan algo especial, una conexión visceral con el publico britanico, quizas por la facilidad para identificarse con sus letras, o por la cualidad de sus canciones para erigirse en himnos para ser cantados por una multitud fuera de si.
Tanto el ayuntamiento de Manchester como los organizadores del evento trataron los conciertos que tuvieron lugar el pasado fin de semana en Heaton Park como lo que realmente fueron: una peregrinacion de miles de fans que se acercaron de todas partes del norte de Inglaterra y Gales para ver a sus idolos. Para ello se dispuso de un espectacular despliegue de medios, incluyendo una flota de buses dedicada exclusivamente para los asistentes al concierto, y especialmente la concesion de una amplisima zona del enorme Heaton Park para acoger a las multitudes y ofrecerles no solo musica, sino ingentes cantidades de bebida (cerveza y sidra) y comida (de hamburguesas a comida china).
Sin duda, se respiraba un ambiente de festival. Y no solo por los medios ofrecidos por la organización sino porque la musica, que comenzo a sonar a las 5 y termino a eso de las 11.00, incluyo la participacion de 5 grupos, tres de ellos en lo alto de las listas de ventas del indie-rock britanico.
Abrieron Free Peace, un grupo de blues-rock setentero. Canciones laaaargas y yeah yeaaahs cada cinco segundos. No, no me gustaron.
Despues de la decepcion inicial, le toco el turno a Twisted Wheel. Una banda joven, con mucha actitud. Sus canciones, aunque por momentos un tanto simplistas y con un regusto sospechoso a los anfitriones, me dejaron buen sabor de boca. Especialmente cuando dejaban la vena Oasis y parecian ser unos Pogues poseidos por los Sex Pistols.
Los grandes nombres empezaron a asomar a continuacion, empezando por The Enemy, un grupo que pese a su juventud, ya va por el segundo disco. Seguramente poco conocidos en Espanha, en el Reino Unido ya se codean con bandas como Bloc Party o Kaiser Chiefs. En mi opinion: nada nuevo bajo el sol. Como dirian los britanicos: ‘not my cup of tea’ = no me gustan demasiado. El concierto, eso si, un ejemplo de profesionalidad, con un sonido muy compacto y potente.
Si la gente ya empezaba a corear algunas canciones con The Enemy, los animos del personal subieron varios puntos con la entrada de Kasabian, que abrieron con ‘Vlad the Imapaler’, primer single de su nuevo disco ‘West Ryder Pauper Lunatic Asylum’, y que ya sono en Panhuelos de Papel hace unos meses. A partir de ahí, una hora y media de psicodelia epica y ritmos bailables en los que ademas de repasar temas ya clasicos de sus discos anteriores como LSF y Empire, tocaron un buen punhado de canciones de su flamante nuevo trabajo, como Fire, Underdog o Fast Fuse.
Y finalmente, los esperados Oasis. Sonrisas y ojos que se iluminan en cuanto pisan el escenario y Liam se acerca al micro para adoptar su ya clasica pose. Suenan los acordes de Rock and Roll Star y se desata la locura colectiva. Locura que duro dos horas en las que sonaron clasicos como Roll with It, Champagne Supernova, Supersonic, Cigarretes and Alcohol o Don’t Look Back in Anger, mezclados con caras B como Masterplan, y canciones de su ultimo disco Dig Out your Soul. Por supuesto, con mejor acogida de las primeras, cantadas a voz en grito por los fans, palabra por palabra de principio a fin, como si fueran oraciones de un mantra para hacer levitar el alma a traves de la musica. Y es que puede ser que Oasis no sean especialmente originales o que no hayan sido capaces de ir mas alla del sonido de sus primeros albumes, pero tienen la nada desdenhable capacidad de hacerte cantar frases como ‘what’s the story morning glory’ a grito pelado, de sumarte a una multitud de 70.000 personas y dejar que tu voz y tus sentidos se pierdan en una celebracion colectiva del rock and roll."
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